¿...Perdida? -libre-

Era de los últimos lugares a los que en realidad hubiera querido ir a pasar una ‘buena’ noche. Simplemente se dejó llevar, yendo por diversos caminos sin mirar cual escogía para alejarse lo más posible de ojos curiosos… o algo peor. No lo quería saber. Por eso le gustaba pasear de noche, pasaba desapercibida… pero en ese momento tuvo mala pata y se encontró con varios indeseables. Por suerte los despistó, pero al lugar que fue a parar…

-Sólo me encuentro con estúpidos… ¿Es que hay luna llena?

Aquel pensamiento dicho en voz alta y que iba con sorna, resultó ser cierto. Parpadeó incrédula observando la luna en todo su esplendor. Se rió por lo bajo ante sus propios pensamientos fuera de lugar. ¿Dar la culpa del comportamiento de algunos a la luna llena? Era absurdo, pero fue un dicho que le vino como anillo al dedo.
Miró a un lado y al otro encogiéndose en si misma.

-Debería dar media vuelta…

Dijo en un susurro tras tragar saliva. Le gustaba pasar miedo, pero no sentirlo en sus propias carnes.

-Pero…

Se giró… viendo a su desgracia que no divisaba la verja.

La melancolía recorría sus venas como cada vez que iba a ese lugar, tan frío, tan gris. Sonrió con tristeza. Si ella estaría aquí las cosas sería distintas. Divisó la tumba a lo lejos.

-Eh?

Agudizó la mirada y pudo observar claramente a una niña que se veía algo perdida.

-Mal lugar para perderse

Sonrió apresurando el paso para acercarse a ella. Respirando con dificultad al llegar.

-Estas bien?

Preguntó como pudo, siempre andando preocupándose por todos, incluso más que de ella misma.

Sus orejillas felinas se alzaron levemente al escuchar los pasos apresurados, poniéndose en alerta y mirando a su alrededor intentando divisar con cierto temor al individuo.
Dio un respingo al escuchar la voz llegada detrás suya. Se giró rápidamente y observó durante unos segundos a la chica asintiendo con la cabeza a su pregunta.

-Quién eres?

Preguntó intentando que su voz sonara firme, aunque no pudo evitar un leve temblequeo en sus labios haciendo vibrar un poco la pregunta.

Le sonrió de manera que pueda tranquilizarse

-Debí suponer que acercarme así no más y hablarle sería una mala idea

Suspiró.

-Tranquila, soy Rainbow, mucho gusto

No quizo hacer algún movimiento brusco que pueda asustarla otra vez, no le gustaba asustar a nadie en especial a las gatitas que conocía.

-Disculpa por asustarte, es que te ví algo alterada, no pude evitar preguntarse si estabas bien

Explicó tranquilamente.

Sus orejillas felinas se movieron ligeramente. Al notar aquella tranquila voz su cuerpo se relajó adoptando una postura más amable. Avanzó varios pasos hacia ella, todavía algo indecisos, para observarla mejor.

-Yo... Hana

Se dejó llevar por esa confianza que le transmitía, aunque normalmente fuera reacia a ello, pero las circunstancias no le dejaban más opción.

-E-estoy bien... pero me he perdido

No sabía si era conveniente dar demasiados detalles sobre como llegó al cementerio, así que por el momento prefirió omitir esa parte.