De compras con Hana

Miró asombrada la cantidad de ropa que había, de tantos estilos diferentes y toda tan linda. Sin soltarse de su mano, fue con Tsubaki mirando la ropa. Le daba algo de reparo elegir sin más, así que sacó varias prendas que le gustaron y miró a su nueva ama indicándole que iba al probador.

Tras el cambio de ropa, salió para que la viera. Llevaba una camiseta ajustada y algo escotada de color oscuro junto con una mini-falda que se le subía levemente a causa de la cola, de colores también oscuros y toques blancos pareciéndose un poco a la ropa de las sirvientas pero más atrevida.

-¿Te gusta? ///

-¿¿En serio??

Si a Tsubaki le gustaba, con eso tenía suficiente.
Quedó agarrada de su mano y la volvió a mirar.

-¿Me ayudas a elegir algo más? //

Agarró con más fuerza de su mano ante aquel beso y tiró de ella algo sonrojada a por más ropa.

-E-entonces, por allí había algo más que me gustaba ///...

Era un poco orgullosa y ante las muestras de cariño en público le costaba devolver aquellos mimos, aunque quería.
Escogió más ropita, estando atenta si a Tsubaki también le gustaba.

-Lindo~~

Era precioso, pero se lo veía caro y no quería aprovecharse de la amabilidad de Tsubaki.

-¿De verdad... no te importa comprarme tanta ropa? -dijo con algo de preocupación

Le costaba entender como podía apreciarla de aquel modo, era una sensación que perdió hace tiempo. Miró el vestido y sonrió levemente. Cuando fue a probárselo, no conseguía llegar a la cremallera de detrás y terminar de abrocharse.

-Etto.. Tsubaki-sam-...

Negó con la cabeza, recordando que no quería que la llamara así

-¿Puedes pasar? Necesito ayuda...

Se miró en el espejo bajándose un poco el vestido y apartando a un lado la larga melena.

-Gracias ^^

Soltó la melena y volteó un poco viendo como le quedaba el vestido. Resaltaba sus mejores atributos, además de ser ligero y agradable a la vista.

-¡Es precioso!

Su expresión se tornó algo más seria quedándose mirando su propio reflejo en el espejo.

-Yo... ya no estoy en aquel horrible lugar gracias a ti.

Dio la vuelta mirándola fijamente.

-Quiero compensarte... ya sé que soy tu sirvienta, pero quiero hacer algo más especial para ti.

Abrió más los ojos, sorprendida. Le costaba comprender aquellas palabras, por qué se molestó en comprarla si no la quería "utilizar" de sirvienta. ¿Qué debía ser para ella?
Tampoco quería que trabajara... no entendía cuál debía ser su papel.

-Entonces... qué debes ser para mi?

Algo más que una dueña... pero ella no sabía que podia ser ese "más"

La felicidad era algo que hasta hace poco no podía alcanzar... e intentaba pensar en ello, en como ser feliz, y su mente quedaba nublada.

-Tsubaki...

Se acercó más a ella alzándose en puntillas y lamiéndole la mejilla.

-Quiero estar contigo...

Le susurró al oído con tono meloso.

Libertad... aquella palabra le dejaba tan buen sabor de boca. Y la calidez del abrazo la hacía sentirse tan bien.

-Vámonos a casa... -dijo sonriendo.

La ropa para ella ya era lo de menos. Quería ver su nuevo hogar, disfrutarlo; volver a caminar sin miedo.

Asintió siguiéndola sin soltarle la mano, mirándola de soslayo.

(siguiente parada~~~X3)